69.7 fue el porcentaje en Boca. Llegó después del cíclo de Benítez y de un interinato de Alves y ganó cinco títulos.
El Coco se mostró feliz en su regreso: chicaneó a Bianchi, habló un traguito de whisky, reivindicó al talco y ni se mosqueó con la interna. "Gracias a Dios tengo a Palermo y Riquelme".